Aplicaciones de Pokémon Go a la formación para el empleo y el marketing para pymes
Un fenómeno social, Pokémon Go, con calado para impactar en la formación
El fenómeno Pokemon, a punto de sobrepasar a Twitter en número de usuarios/as activos/as y, lo que es más importante, con tiempos de uso medio diarios mayores que los de WhatsApp, ha hecho saltar las alarmas.
Se extiende la preocupación sobre el impacto en la productividad de los/as adultos/as y, principalmente, sobre el efecto que tendrá en septiembre en la vuelta de los/as más jóvenes a los centros educativos.
Como siempre, unos ven el vaso medio vacío y otros, medio lleno. En nuestro caso, será que somos excesivamente creativos/as, se nos ocurren muchas posibilidades para aplicarlas a algunas de nuestras actividades, como la formación, la tecnología y el marketing.
Aquí os dejamos algunas:
- Pokeparadas: Pensando en la educación, y aprovechando que están ubicadas en monumentos y sitios significativos, podemos lograr que por una vez los/as alumnos/as se sientan motivados/as por las otrora aburridas visitas culturales.
- En el plano del marketing, Nintendo anunció hace unos días que tiene previsto monetizar los servicios permitiendo las paradas patrocinadas. Además, nada impide a día de hoy que cualquiera haga marketing de guerrilla repartiendo flyers allí donde se da una gran concentración de «cazadores».
- Gamificación: En principio es un juego individual, pero cualquier acción formativa que quiera mejorar el trabajo en equipo puede organizar campañas colectivas de caza en las calles, forjando la colaboración de los/as participantes y como apoyo a foros y fomento del sentido de comunidad.
- Escenarios de aprendizaje: Se lleva hablando «décadas» del uso de la realidad aumentada en la enseñanza, teorizando sobre el uso de aparatosos dispositivos y sofisticados entornos y resulta que, de forma gratuita, tenemos una app multiplataforma y universalizada para distintos targets que está pidiendo a voces que los/as pedagogos/as la integren como una herramienta más.
Un poco de imaginación, unida a la cresta de la ola que viene con Pokémon Go, abre un mundo de posibilidades donde otros solo ven inconvenientes.