En este mundo de la formación siempre ha habido pedagogía, pero casi nunca pedagogos, puesto que estos se encontraban ausentes. El especialista en los procesos de enseñanza-aprendizaje y encargado de diseñar las acciones formativas y detectar las necesidades de aprendizaje, no había sido reconocido dentro de su propio campo de trabajo, tarea que no le pasaría a un abogado, médico o psicólogo. Tradicionalmente, el pedagogo se vinculaba a los despachos de orientación de la educación reglada y este era el principal problema en su reconocimiento; la sociedad desconocía su desempeño profesional en el mundo laboral. Por tanto, y gracias a muchos años de trabajo y continuas reivindicaciones, en el sector de la formación, son acogidos cada vez con mayor frecuencia, un hecho insólito que no debería ser noticia.
En la actualidad, hemos visto cómo el auge de la formación en las empresas ha emergido y ha cobrado la importancia necesaria para llegar a ser toda una potente industria en desarrollo y expansión. La sociedad ha ido avanzando a grandes pasos, pero la evolución tecnológica, con respecto a la sociedad, se podría decir que ha sido mucho mayor, así pues, gracias a ello, en el campo de la formación se han producido notables mejoras que han hecho que la tecnología sea más accesible para todos, disminuyendo la brecha digital. En este caso, es función del pedagogo, como parte de la actual plantilla de la empresa, ayudar a que la sea organización más productiva y sostenible, programando y desarrollando acciones formativas con vistas a que esto se entienda como una inversión de dinero a medio/largo plazo.
E-learning es una de las palabras que más suenan en el campo de la educación, y en especial de la formación. En este tipo de formación ha incrementado los focos de aprendizaje por parte de los alumnos. Ofrece muchas ventajas entre las que podemos mencionar:
- Su gran potencial interactivo entre profesor y alumnado.
- La flexibilidad en los tiempos y espacios educativos.
- El aprendizaje colaborativo entre comunidades virtuales de docentes y estudiantes.
Entre las herramientas de contenido que se usan con más frecuencia en el mercado podemos mencionar a eXelearning y Story Line. La primera es una herramienta de creación de contenidos educativos de código abierto, o sea, gratis. Entre su uso destaca la utilización de árboles de contenido, de actividades interactivas de autoevaluación y de iDevice, con el fin de destacar los contenidos importantes. Es fácilmente exportable a formados HTML Y SCORM. Por otro lado, Articulate es también una herramienta de creación de contenidos que permite trabajar a través de “escenas” y “capas” mediante saltos entre estas. Además, tiene animaciones y es más interactivo que el anterior, y más rico desde el punto de vista pedagógico gracias a la cantidad de recursos que ofrece. Pero, por el contrario, supone una gran cantidad de tiempo y dinero la creación de un contenido con esta herramienta. No debemos olvidar que es una herramienta con fines formativos, por lo que no podemos dejarnos engañar por la apariencia visual, que es evidentemente mucho más atractiva, pero hay que buscarle a ese contenido un sentido pedagógico adecuado y correcto, por lo que el trabajo del profesional, en este caso, el pedagogo, es indispensable para diseñarlo.
Para concluir el papel del pedagogo en la empresa es fundamental, más aún en la sociedad del conocimiento, en la que el aprendizaje y la formación son esenciales. Las empresas se han dado cuenta que la formación es un instrumento necesario en estas, considerado como una ventaja competitiva indispensable para diferenciarse del resto de competidores de su propio sector y con el fin de reciclar y actualizar conocimientos en los trabajadores de forma continua para enfrentarse a los retos del futuro.